Con su teatro, Lorca se erige en un gran defensor de colectivos oprimidos, como las mujeres, los gitanos o los homosexuales. Todos ellos tienen un gran protagonismo en su producción, especialmente las mujeres, que se convierten en heroínas o víctimas llenas de pasión y humanidad.

Doña Rosita la soltera
Rosita, la protagonista de este drama lorquiano, está comprometida con su primo, que súbitamente emigra a Argentina, aunque bajo la promesa de que volverá para casarse con ella. Tras quince años de relación epistolar, el primo le propone una boda por poderes, aunque ese momento nunca llega, y en realidad él ya ha contraído matrimonio con otra mujer. El paso del tiempo ha hecho mella en Rosita, a cuya decadencia se suma la ominosa visión de la soltería en la España de la época. Lorca terminó de escribir esta obra en 1935 y fue estrenada en Barcelona el 12 de diciembre del mismo año, uno antes de su muerte.

La zapatera prodigiosa
La protagonista de esta farsa violenta, enmarcada en el ambiente rural de la España de comienzos del siglo xx, es una atractiva joven casada por conveniencia con un zapatero que la supera ampliamente en edad. La actitud rebelde que ella muestra ante su marido y la mala fama que suscita entre los vecinos fuerzan la marcha del zapatero. Para salir adelante, su mujer se ve obligada a convertir su casa en una taberna, por donde circula una amplia relación de pretendientes, aunque ella se mantiene fiel a su marido. Con el tiempo, llega al pueblo un titiritero que en realidad es el zapatero disfrazado. Las conversaciones que ambos mantienen afloran el amor que se profesan y los abocan a la reconciliación. La primera representación de La zapatera prodigiosa tuvo lugar en el Teatro Avenida de Buenos Aires el 1 de diciembre de 1933.

El público
En drama surrealista, escrito en 1930, Lorca se centra en la relación entre la identidad sexual, el amor y la representación de la verdad en el teatro. El autor abandona aquí el teatro convencional y crea un texto complejo, vanguardista, “irrepresentable”, según manifestó él mismo, que mezcla incesantemente realidad y ficción. La complejidad de este “teatro imposible” hizo que su primera representación se postergara hasta el 12 de diciembre de 1986, en el Piccolo Teatro de Milán.

Mariana Pineda
Este drama, escrito por Lorca entre 1923 y 1925, se asienta en la figura de Mariana Pineda, una joven granadina que manda bordar una bandera que se convertirá en la insignia en la insurrección contra el reinado absolutista de Fernando VII. Detenida y encarcelada por ello, es ajusticiada en 1831 ante su negativa de delatar a los conspiradores, lo que habría supuesto su absolución. Entre los rebeldes se encuentra su amado, don Pedro de Sotomayor, de quien confía, en vano, que vaya a liberarla. Pocos años después de su muerte, Mariana Pineda fue encumbrada como heroína de la libertad. Su memoria quedó sellada en romances, poemas, rondallas y obras literarias y también teatrales, la más significativa de las cuales es la Mariana Pineda de García Lorca. Su estreno, en 1927, generó una gran agitación en el mundo cultural y teatral tanto de España como de Latinoamérica, así como en la prensa de la época.